El nacimiento de un bebé atrae toda nuestra atención hacia este nuevo ser que llega a nuestras vidas y esta atención tan ganada no nos permite darnos cuenta que también nace una mamá, ya sea por primera, segunda o tercera vez. Los siguientes muchos días, semanas y hasta meses estamos dedicadas y atentas sin descanso a nuestro bebé, pero también en cada mamá pasan muchas otras cosas.
Un torbellino hormonal nos provoca una serie de extraños momentos anímicos y emocionales, entramos en una etapa donde necesitamos estar muy maternadas para poder maternar a nuestro bebé, y aquí consciente o no brinca nuestra historia personal. Fisiológicamente tenemos una depresión post-parto que dura alrededor de tres semanas y vienen muchos acomodos en la vida de pareja, familia y trabajo.
Y claro está también, que en estas primeras semanas establecemos la lactancia, todo un reto donde empezamos a poner en práctica lo que leímos, investigamos o nos informamos y realmente se vuelve un desafío pasar de la teoría a la práctica, especialmente porque nos surgen dudas, miedos, inseguridades y nos cuestionamos cómo vamos a ser en este nuevo rol de mamá. Generalmente muchas de mis propias expectativas no se cumplen y eso me provoca mucha inquietud en si estoy haciendo las cosas como se “debe” o como mi instinto me lo dicta.
Lluvias de recomendaciones y formas de ser buena mamá, de comparaciones con mi hermana, prima, amiga, comadre, mamá, abuela, etc., llegan sin siquiera pedirlas y eso me confunde.
Y un bebé que requiere de mi atención y energía al 100%...! Paciencia, respeto a mi propio ritmo y confianza, pueden ser buenos compañeros en este doble nacimiento, el de mi bebé y el de mi ser mamá.
Atender mi intuición y darme la oportunidad de probar y cometer errores y desde ahí elegir con lo que me quiero quedar, hacer propias mis elecciones de maternidad, como querer amamantar, alimentarlo a libre demanda, hacer co-lecho, cargarlo mucho.
Recordar que todo esto es parte del paquete que viene junto con este nuevo bebé y que el vínculo tan importante y especial que voy a ir creando con la lactancia, es uno de los mejores regalos que yo puedo darle a mi hij@.
Hacer una respetuosa y contenida transición del vientre al mundo, contacto, apego, vínculo y claro LECHE MATERNA.
Abril Cantarell
IBCLC. Abril Cantarell Salazar
Consultora Certificada en Lactancia Materna IBCLC
Especialista en: Psicoterapueta Gestalt
Trabaja en: Consultorio . Atlas Colomos 3000 privada de bugambilias 9. Col.Lomas del Bosque. Zapopan, Jalisco 45118
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